El exsenador Arturo Char se retira definitivamente de la política tras ser acusado por una serie de actos de corrupción. Su relación con la exministra Aída Merlano lo vincula a fuertes declaraciones entregadas por la misma, para hacer saber al país que el clan Char no tiene las manos limpias.  

Un cargo de fraude electoral es atribuido a Arturo char tras haber permanecido cerca de la polémica figura de Aida Merlano. Una compra de votos es negada fervientemente por el exministro mientras afirma que su relación con, la hoy en día encarcelada Aida Merlano, era meramente profesional.  

La imparcialidad se ve refleja en las decisiones apresuradas por condenar al miembro del clan Char tras haber dejado el país para ir a visitar a sus hijos y esposa, residentes en Estados Unidos. “No salí del país para evadir a la justicia, decidí dedicarle tiempo a mi familia”, afirma el expresidente del senado, tras su proceso de investigación. Por otra parte, nos permite conocer cómo está llevando al día sus citatorios desde la virtualidad.  

Desacreditando a Aída Merlano e insistiendo en su inocencia, Arturo Char señala que las mentiras han puesto en duda su imagen.