Junior quedó eliminado de la competición en los octavos de final contra el Deportivo Pereira, victoria de los matecañas 2 a 0 para dejar el global con un marcador de 5 a 4, tras el resultado obtenido la semana anterior en el estadio Metropolitano.

Junior empezó con la novedad de no tener a Sebastián Viera desde el inicio, pues presentó complicaciones en el calentamiento previo. Y de entrada, empezaron a avisar, para buscar la tranquilidad, con Hinestroza y González, como los encargados para aprovechar los espacios presentes del Pereira en su zona defensiva.

La intención fue clara, teniendo en cuenta la superioridad desde lo individual y lo tácticamente planteado, pues poco pudo hacer el Pereira en el primer tiempo, apenas con escaramuzas por la zona de bandas, saliendo poco en bloque. En el caso de los de Reyes, empujaron a los locales al arco propio, dejando el espacio de la mitad para que Junior circulara sin ningún tipo de complicación.

Los errores en defensa volvieron a ser constante, pues en los partidos recientes de Junior, los tantos en contra fueron por distracciones. Parece ser constante y sobre el final del primer tiempo, Alcatraz cobró un tiro de esquina, la mala salida de Chaux y el posicionamiento erróneo de Daniel Rosero dejaron a Diego Peralta solo, para cabecear e igualar, momentáneamente, la serie.

El empuje de Junior para el segundo tiempo fue total en ataque, aprovechando la velocidad de sus jugadores para buscar el arco local, pero el último pase y la definición estuvieron ajenos, además de las grandes atajadas de Castaño, que de a poco se hizo figura del partido. Por las bandas, buscando el centro, cortando hacia adentro, así intentó el onceno de Reyes, la definición se quedó atrás.

La pelota quieta sería fundamental sobre el remate del partido. Pereira, en un tiro de esquina, con Brayan León como figura, anotó el que sería el tanto de la clasificación, tras ganarle toda la posición, llegando solo al primer palo para anotar el segundo y desatar la alegría en el Hernán Ramírez Villegas.

La impotencia y cansancio se evidenció en los jugadores de Junior, que quedaron atónitos ante la cantidad de opciones generadas, cero concretadas y los errores en marcación en la pelota quieta, dejando al Pereira con un planteamiento fresco, que aprovechó las que tuvo, dándole el rol protagónico y del desgaste a los de Reyes. Triunfo fundamental para los de Márquez, que se ilusionan en la siguiente ronda.