El encargado de hacer este anuncio al país, fue el presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana y Arzobispo de Villavicencio Oscar Urbina mediante un comunicado.
Monseñor Urbina afirmó que “hay motivos para las manifestaciones” y que las protestas son un derecho de la ciudadanía. “El cansancio y el descontento, que están manifestando ciertas movilizaciones ciudadanas, revelan problemas graves que no hemos logrado superar y que tienen su origen y su expresión en la corrupción, la inequidad social, desempleo y la imposibilidad de amplios sectores para acceder a los servicios básicos de alimentación, salud y educación”, dijo.
Además, en el comunicado, la Iglesia católica invita a la comunidad a manifestarse de forma pacífica sin afectar la infraestructura y la integridad de las demás personas.