Exgobernador de Quindío fue denunciado por abuso sexual a menor de edad

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El 4 de enero de 2020, la opinión pública conoció que el saliente gobernador de Quindío y sacerdote de la Diócesis de Armenia, Carlos Eduardo Osorio Buriticá, fue suspendido de su ministerio sacerdotal por su obispo, monseñor Carlos Arturo Quintero. Se dijo en su momento que el exgobernador había sido suspendido por desobediencia, por haber ejercido como gobernador cuando la Iglesia prohíbe que sus sacerdotes participen en política.

Sin embargo, Caracol Radio conoció que el sacerdote y exgobernador fue suspendido de su ministerio sacerdotal por una denuncia de un hombre que dice haber sido abusado sexualmente por Osorio Buriticá, cuando era menor de edad.

El exgobernador ya venía suspendido desde 2015 por el entonces obispo de Armenia, monseñor Pablo Emiro Salas, cuando ganó las elecciones con el apoyo de los partidos Liberal y Conservador. En ese momento sí fue suspendido por desobediencia.

Según el actual obispo, la denuncia por abuso sexual contra Osorio es de antes de 2018: «Se debe señalar que la Diócesis de Armenia estuvo vacante y Monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez asumió como Administrador Diocesano el 13 de diciembre de 2018 y en tal condición no tenía las facultades para abrir procesos investigativos desde el tribunal eclesiástico. Una vez Monseñor Carlos Arturo Quintero Gómez asumió como Obispo de la Diócesis, el 01 de febrero de 2019 y habiendo conocido la denuncia, se dio a la tarea de indagar sobre los protocolos que se deben seguir frente a esta clase de denuncias, para lo cual se le dieron las orientaciones precisas desde La Nunciatura Apostólica y la Conferencia Episcopal de Colombia».

Aunque ningún artículo del Derecho Canónico le prohibía a monseñor Quintero abrirle un proceso penal canónico a un sacerdote que esté suspendido, en este caso por hacer política, el obispo decidió esperar. Prueba de eso es que suspendió, el primero de enero, al ya suspendido desde 2015 padre Osorio Buriticá: «Por su condición de gobernante del departamento del Quindío se debió esperar a que Osorio Buriticá terminara su período para proceder según los protocolos del Derecho Canónico. El 01 de enero del 2020, un día después de haber concluido su administración como Gobernador, se le entregó la ratificación de suspensión que había hecho Monseñor Pablo Emiro Salas Anteliz y se le notificó acerca del proceso canónico que se le abría por denuncia de una persona en su contra».

Significa que no podrá ejercer como sacerdote mientras la Fiscalía de El Vaticano, que es la Congregación para la Doctrina de la Fe, investiga esta denuncia. La Fiscalía colombiana aún no conoce sobre esta denuncia, y si conociera, pues fácilmente la archivaría porque el presunto delito ya prescribió.

LA NARRATIVA DE LA SUSPENSIÓN

«Estoy pagando por mi desobediencia», le dijo el primero de abril a Semana el exgobernador Osorio. Y esa es una verdad a medias, porque si bien sí fue suspendido por incursionar en política, la nueva suspensión se da por una denuncia de abuso sexual a menor de edad.

Osorio Buriticá fue suspendido el 20 de marzo de 2015 por violar el artículo 3 del canon 285 del Código de Derecho Canónico que reza: «Les está prohibido a los clérigos aceptar aquellos cargos públicos, que llevan consigo una participación en el ejercicio de la potestad civil».

La suspensión del primero de enero de 2020 reposa en el Decreto 142-2020 y comienza advirtiendo que el exgobernador ya había sido suspendido: «… fue suspendido ad cautelam por decreto del 20 de marzo de 2015 dado por monseñor Pablo Emiro Salas Anteliz».

Luego explica el motivo de la nueva suspensión: «… ha sido acusado ante la Oficina del Buen Trato de la Diócesis de Armenia y se hace necesario una censura para proveer mejor la disciplina eclesiástica y por lo mismo, fue notificado verbalmente de esta acusación el día 26 de diciembre de 2019, para lo cual el padre Carlos Eduardo deberá acudir a la Oficina del Buen Trato, en orden a hacer sus respectivos descargos y presentar su versión de los hechos».

Así el exgobernador ya se haya presentado ante esta oficina, el obispo da a entender en el decreto que el proceso canónico penal comenzará una vez Osorio Buriticá haya aclarado las decenas de procesos que tiene en la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría. Esto podría tardar varios años: «… ha concluido su periodo de Administración Pública, como Gobernador del Departamento del Quindío y ante este hecho, es prudente esperar las investigaciones que se adelanten, así como las sentencias y fallos de los procesos que surjan en orden a su administración».

Con un «Suspéndase ad cautelam del ejercicio de las Órdenes Sagradas» y un «Comuníquese y cúmplase», el obispo Quintero le notificó al exgobernador, pero no a la opinión pública.

El 3 de enero de 2020, el alto prelado emitió un escueto comunicado que omite informar las razones de la suspensión: «El obispo de la Diócesis de Armenia se permite informar a la Opinión Pública, que el presbítero Carlos Eduardo Osorio Buriticá, quien fungía como gobernador del departamento del Quindío, fue suspendido ad cautelam, por Decreto 142 del primero de enero del 2020, de acuerdo con las orientaciones del Código de Derecho Canónico».

Termina el comunicado puntualizando que «La suspensión abarca todos los actos del ministerio presbiteral, como celebrar los sacramentos, ejercer la dirección espiritual o dar catequesis».