Este viernes las autoridades informaron que el confinamiento de seis días ordenado en Australia Meridional para atajar un repunte epidémico terminará antes de lo previsto, luego constatar que la situación sanitaria no era tan grave como se había pensado, a raíz del testimonio engañoso de un hombre.

El primer ministro del estado de Australia Meridional, Steven Marshall, precisó que el confinamiento será levantado el sábado por la noche y no el lunes, como estaba previsto.

La medida surgió con la detección de un foco de contagios en un hotel de Adelaida en el que realizó su cuarentena un hombre de unos 50 años, contagiado de covid-19, que acababa de regresar del Reino Unido.

Sin embargo, fue una pizzería de Woodville, un suburbio de Adelaida, la que generó mayor preocupación y llevó a las autoridades a ordenar el confinamiento.

Un empleado de la pizzería resultó infectado, según una cadena de transmisión identificada desde el primer hotel.

Pero las autoridades se preguntaban cómo un hombre que trabajaba en la cocina de un segundo hotel se había podido infectar en esa pizzería.

Según Marshall, el individuo le dijo a los equipos que investigaban la cadena de transmisiones que había sido cliente de la pizzería, por lo que se temía que hubiera podido contagiarse a través del embalaje de una pizza, lo que podría ser indicativo de una cepa particularmente virulenta.

Pero al final se descubrió que el hombre en cuestión había mentido y que en realidad trabajaba en la pizzería, por lo que había estado en contacto con otras personas infectadas.

El jefe de la policía local afirmó que «si esa persona hubiera sido honesta con los equipos que investigaban las cadenas de transmisión, no habríamos tenido un confinamiento de seis días».

Fuente:AFP