Al cumplirse una década de la puesta en marcha de la política nacional de gestión del riesgo de desastres, y justo cuando varias regiones del país afrontan una nueva situación de emergencia invernal en puntos críticos identificados desde hace varios años, la Contraloría General de la República consolidó la información de los recursos invertidos en tales actividades en este tiempo (de 2012 a 2022), y encontró que pasan de los 11,4 billones de pesos, pero que su impacto está lejos de ser el esperado.
Estos recursos se han destinado través de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y el Fondo Adaptación en obras y proyectos para la reducción del riesgo.
De $9.4 billones que le fueron aprobados al Fondo Adaptación desde el 2012, se han asignado $8.1 billones y contratado $7.7 billones, para la ejecución de cinco megaproyectos: Canal del Dique, La Mojana, Gramalote, Jarillón de Cali y Río Fonce, en seis sectores (vivienda, educación, salud, acueducto, transportes y reactivación económica).
Ninguno de estos proyectos se ha concluido y se han presentado atrasos e incumplimientos reiterados.
Así mismo, no se ha terminado ninguno de los proyectos para la atención de necesidades de las comunidades afectadas.
Durante las vigencias 2019, 2020 y 2021, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) ha comprometido recursos por $3.3 billones, representados en 255 proyectos, de los cuales 44 han sido terminados (el 17,2%), 80 están en ejecución y 131 en proceso de contratación.
Por otra parte, se ha podido identificar que, en los últimos 18 meses, sólo con destino a la atención de eventos, cuyo impacto en vidas, bienes, medio ambiente ha resultado altamente representativo, se ha destinado una inversión que supera los $1.18 billones de recursos del orden nacional y territorial.
Esta es la situación que ha podido identificar la Contraloría General de la República de proyectos a cargo de la UNGRD y el Fondo Adaptación:
Proyectos de la UNGRD