Este martes, en el noreste de Colombia, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) llevó a cabo el asesinato de tres policías en la región de Catatumbo, coincidiendo con la orden del Comando Central de la guerrilla de cesar el fuego a partir del jueves.
Uno de los oficiales, llamado Samir José Vega, perdió la vida en el municipio de Tibú, ubicado en el departamento de Norte de Santander, cerca de la frontera con Venezuela. Fue alcanzado por un disparo efectuado por un francotirador mientras cumplía con su deber de vigilancia en el sector conocido como La Petrolea.
El director de la Policía Nacional, el general William Salamanca, expresó su profundo pesar en Twitter: «Hoy me embarga un profundo dolor ante la pérdida de nuestro patrullero Samir Vega, quien sacrificó su vida protegiendo a la comunidad de Tibú. Extendemos nuestra solidaridad a su respetable familia. Daremos con los responsables de su asesinato. Que descanse en paz».
Además, este martes otros dos policías perdieron la vida en el municipio de El Zulia, que limita con Cúcuta, una región fronteriza con Venezuela. Jerson David Cuevas Pineda y Renson García Castro fueron baleados por presuntos miembros del ELN, quienes les robaron sus armas reglamentarias y huyeron del lugar. Los oficiales se encontraban desayunando en un establecimiento ubicado en el sector de La Alejandra.
Estas tres muertes se suman a los actos delictivos que han ocurrido en Cúcuta y en otras áreas del departamento desde la madrugada de hoy, cuando la guerrilla conmemora su 59 aniversario y ha llevado a cabo acciones como colocación de explosivos en carreteras, exhibición de banderas, grafitis y pancartas.
Sin embargo, también este martes, el Comando Central del ELN ha dado la orden a todas sus estructuras de cesar «todas las acciones militares ofensivas contra las Fuerzas Militares y de Policía en todo el territorio nacional» a partir del 6 de julio hasta el 3 de agosto, fecha en que comenzará oficialmente el cese al fuego bilateral de 180 días pactado con el Gobierno colombiano.
Este periodo de «alistamiento» es parte del acuerdo entre la guerrilla y el Gobierno, establecido en la tercera ronda de negociaciones en La Habana, e implica un cese al fuego bilateral nacional a partir del 3 de agosto, precedido por un periodo de preparación a partir del 6 de julio entre ambas partes.
Las estructuras del ELN deberán suspender también las acciones de inteligencia a partir de este jueves, aunque mantendrán dispositivos de defensa y seguridad activos «para responder a amenazas o ataques de cualquier entidad o grupo armado contra nuestras unidades o contra la población civil».
