El pasado 3 de Enero, Portafolio, diario de noticias económicas y de negocios de El TIEMPO Casa Editorial, publicó un artículo señalando como la depresión «está consumiendo las vidas de los bogotanos».
En dicho artículo señalan estudios de distintas universidades, además, la opinión de de expertos frente a los hallazgos. Varios estudios apuntan que el caos de la ciudad es un detonante para que más personas sufran de depresión.
Un estudio de la Universidad de los Andes, realizado en 11 ciudades de América Latina, desveló que: los trancones están asociados a síntomas depresivos. En la capital del país 36% de los encuestados presentaron alteraciones y efectos negativos en su salud mental.
La SAP (Servicio de Atención Psicológica) de la Universidad Nacional detectó que las personas con síntomas depresivos suelen usar términos negativos, pesimistas y destructivos para referirse a ellos mismos.
«Las personas deprimidas se narran y se construyen con palabras como culpa, tristeza, odio, rabia, ansiedad, soledad»; dijo la psicóloga Zaseth Cristina Arias, estudiante de la maestría en psicología clínica de la Unal.
Igualmente hay estudios que afirman que «los discursos negativos, cada vez más recurrentes en el ámbito social urbano, también están relacionados con este trastorno». Las localidades de Kennedy, Usaquén y Teusaquillo son las que más registran casos. Entre las distintas causas están los «factores ambientales como el estrés y la ansiedad en los ámbitos laborales y familiares».
De acuerdo con la Secretaría de Salud, durante el año 2018 fueron diagnósticas en Bogotá 92.035 casos de depresión, y desde agosto hasta este año, ya son 34.909. En Varios casos críticos, que no fueron tratados, terminan en suicidios. Según Medicina Legal y Ciencias Forenses, entre el 2016 y 2018 se han registrado 1.090 suicidios en Bogotá.
El distrito tiene a disposición gestores de prevención, la Ruta integral de Atención para Problemas y Trastornos Mentales y Epilepsia.