En la Sala 11 del Centro de Servicios Judiciales se llevó a acabo este lunes la audiencia de medida de legalización de captura de los dos implicados en el doble homicidio de los hombres cuyos cuerpos fueron arrojados en un arroyo cerca al corregimiento de La Playa y el barrio Las Flores, jurisdicción de Barranquilla.

Previo a esta audiencia se realizó la audiencia de control posterior de registro y allanamiento para constatar que el procedimiento de captura fue bien realizando por las autoridades. En la misma el Juez dio por sentado la legalidad del allanamiento en la vivienda ubicada en el barrio San José de Barranquilla, donde se habría cometido uno de los crímenes, pues en la residencia se encontraron rastros de sangre de las víctimas, a pesar de que la madre de uno de los implicados la había lavado.

Después de más de una de una hora de este procedimiento legal, el Juez Séptimo Penal Municipal con Funciones de Controlar de Garantías, Camilo Pardo, dio por iniciada la audiencia de legalización de captura de los dos capturados, uno cerca del lugar donde agentes de la Policía encontraron los cuerpos, y el otro en el sector de Lagos de Caujaral.

Luis Carlos Narváez Narváez, natural de San Pelayo, Córdoba; y Leonel Cadena Rodríguez, natural de Barranquilla, según relató la Fiscalía, habrían sido asesinados por Johan Severiche Beltrán y Arley Riquett Baldovino, quienes estuvieron acompañados por sus abogados durante el proceso de legalización, que se cumplió este lunes en el Centro de Servicios Judiciales de Barranquilla.

Los cuerpos de los hoy occisos fueron encontrados semidesnudos cerca de un arroyo entre el corregimiento de La Playa y el barrio Las Flores y con varias heridas en sus cuerpos producidas con arma blanca.

En ese lugar, una patrulla del cuadrante se percató que había dos carros y una persona estaba arrojando un bulto al lado de la vía, al llegar al sitio se encuentran que eran cuerpos de personas y cerca de los mismos estaba uno de los acusados. El otro habría huido del lugar cuando sintió la presencia del la Policía, pero fue capturado más adelante, en inmediaciones del Lago de Caujaral, relativamente cerca del sitio. Conducía un vehículo de color blanco, el mismo que había divisado la patrulla del cuadrante cerca donde se hallaron los cuerpos.

El Fiscal explicó detalles, captados por las cámaras de seguridad, de los lugares por donde pasaron los vehículos en la madrigada del domingo antes de llevarlos a donde presuntamente, tanto Johan Severiche Beltrán y Arley Riquett Baldovino, estaban arrojando lo que más tarde se comprobaría eran los cuerpos de Narváez y Cadena.

Una de las hipótesis que manejan las autoridades es que se trataría de un negocio de estafa entre las partes y por eso los estafados habrían tomado la determinación de acabar con sus vidas. Tanto Narváez como Cadena viven en Montería, Córdoba, pero había llegado unos días antes al departamento del Atlántico y estaban alojados en el municipio de Soledad. Localidad de donde habrían sido llevados hasta Barranquilla por los hoy implicados en el doble asesinato.

Según se pudo conocer, una de las víctimas fue asesinada dentro de uno de los vehículos y el otro en la residencia del barrio San José. En la madrugada de ese domingo, los hoy capturados decidieron deshacerse de los cuerpos y los llevaron hasta el sitio donde al amanecer del domingo pensaban dejar tirados, pero fueron sorprendidos por la Policía.