Este jueves 4 de julio, la Biblioteca Luis Ángel Arango fue el escenario de la conmemoración de los 33 años de la Constitución de 1991. Magistrados, exmagistrados y académicos se reunieron para discutir la evolución de la Carta Magna hasta el 2024, así como la propuesta de una nueva constituyente y las nueve iniciativas presentadas por el presidente Gustavo Petro, producto de un «gran acuerdo nacional».

El presidente de la Corte Constitucional, José Fernando Reyes, fue uno de los ponentes y enfatizó la necesidad de defender la Constitución de 1991. «Debemos cuestionarnos, ¿cómo podemos hablar de nuevos proyectos constitucionales si aún no hemos logrado desarrollar y cumplir el pacto que establecimos en 1991? La Constitución no debe ser una masa maleable y sin forma, susceptible a cambios arbitrarios, sino un texto firme con flexibilidades limitadas, que requiere requisitos meticulosos y estrictos para su modificación», afirmó Reyes.

Durante la conmemoración de los 33 años de la Constitución de 1991 en la Biblioteca Luis Ángel Arango, varios actores políticos y académicos debatieron sobre la propuesta de una nueva constituyente y la evolución de la actual Carta Magna.

El senador Humberto de la Calle destacó que, si se considera una constituyente, el gobierno debe primero generar confianza. «La idea es en sí misma válida. Nadie puede decir que la Constitución es intocable. Si el doctor Cristo sugiere seguir el camino constitucional, el gobierno tiene derecho a plantearlo. Pero eso no cierra la discusión. Me gustaría ver coherencia en el discurso del doctor Cristo y el presidente», señaló de la Calle.

Por su parte, la procuradora Margarita Cabello subrayó la importancia de seguir fortaleciendo la Constitución del 91. «Debemos continuar aplicándola, aún queda mucho por hacer. Es una constitución excelente, resultado de una constituyente popular en 1990. Enfoquémonos en eso y no nos desviemos en especulaciones», afirmó Cabello.

La senadora Aida Bella de la Unión Patriótica criticó la falta de aplicación equitativa de la Constitución. «La Constitución, creada para todos, no ha sido aplicada así. Según el Banco Mundial, somos uno de los países más inequitativos del mundo. La riqueza está mal distribuida, mientras algunos ganan sueldos millonarios, la mayoría de los campesinos no tienen ni pan a los 65 años», declaró Bella.

El exfiscal Alfonso Gómez Méndez cuestionó la necesidad de una constituyente. «Debemos preguntarnos, ¿para qué una constituyente? ¿Qué quieren cambiar? Una constituyente es un proceso para modificar la Constitución. Entonces, ¿cuáles normas actuales necesitan cambio y por qué? Antes de lanzarnos a esto, debemos responder esa pregunta fundamental», comentó Gómez Méndez.

El evento incluyó tres paneles: uno sobre la eficacia del control constitucional en los últimos 33 años, otro sobre el equilibrio de funciones del poder público desde la Constitución del 91, y un tercer panel sobre la evolución y retos de los derechos de las mujeres en Colombia.