Sin embargo, la situación para del mercado laboral sigue siendo compleja: tenemos 4.5 millones de desocupados y la mayoría de los nuevos desocupados eran trabajadores de las microempresas en las grandes ciudades.
En el último año se destruyeron 4.27 millones de puestos de trabajo y el fenómeno afecta principalmente a las grandes ciudades del país. La mayor parte de los empleos destruidos corresponde al empleo particular, trabajadores por cuenta propia y empleadas domésticas.
«Así como en actividad económica fue abril el más profundo de caída, estamos viendo que en el mercado laboral fue mayo el mes más importante de deterioro del mercado laboral», aseguró el director del Dane, Juan Daniel Oviedo.
Sin embargo, el desempleo en las grandes ciudades sigue creciendo. En Bogotá, por ejemplo, se destruyeron 1.06 millones de trabajos en el último año; en Medellín, 274.000 empleos y en Cali, 283.000.
La situación del mercado laboral es preocupante para Neiva, donde 4 de cada 10 personas que buscan trabajo se encuentran con que no hay oportunidades y en Ibagué, donde la desocupación llega a 37,6%, seguido por Popayán con el 33,7%.
Los sectores que más destruyeron puestos de trabajo fueron las actividades artísticas, entretenimiento y recreación, seguido por el comercio y la administración pública, defensa y educación.
