Una impresionante muestra de apoyo se desplegó en las calles de Niamey este domingo, cuando miles de personas se congregaron para expresar su respaldo a la junta golpista que actualmente controla Níger. La multitud, que llenó el estadio Seyni Kounche y sus alrededores, coreó lemas en favor del Consejo Nacional de Salvaguardia de la Patria (CNSP), el grupo militar que tomó el poder en un golpe de Estado el mes pasado.

Los manifestantes enarbolaban banderas de Níger, así como de otras naciones como Rusia, Argelia, Mali, Burkina Faso y Guinea-Conakri. Con pasión y determinación, los participantes demandaron la soberanía de su país y expresaron su rechazo a la intervención externa en sus asuntos. Dirigentes de la junta golpista también estuvieron presentes, y el general Mohamed Toumba, miembro del CNSP, habló en el evento, destacando la resolución del grupo de cambiar el rumbo de Níger.

La manifestación se caracterizó por un fuerte sentimiento patriótico y una reafirmación de la disposición de los ciudadanos a resistir cualquier ataque militar foráneo. Las sanciones comerciales y financieras impuestas por la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) no amedrentaron a los manifestantes, quienes reafirmaron su determinación de enfrentar las dificultades económicas con valentía.

En un tono desafiante, los participantes también exigieron la retirada de las fuerzas antiterroristas francesas y occidentales del país, y la nacionalización de las minas de uranio de Níger, un recurso crucial para la economía del país. A pesar del ultimátum de la Cedeao para devolver al poder al presidente depuesto, Mohamed Bazoum, los manifestantes reiteraron su rechazo a una intervención militar extranjera y expresaron su unidad en la lucha por la autonomía y la autodeterminación.