A propósito del Día Internacional de la Capa de Ozono, que se celebra este lunes, el Servicio de Monitoreo de la Atmósfera de Copérnico, CAMS (por sus siglas en inglés), ha dado buenas noticias sobre la recuperación de la misma. Este año el agujero en la capa de ozono de la Antártida será más pequeño y más corto que el año anterior, lo que confirma la tendencia de recuperación que ha tenido la capa desde 2000.
“La expectativa actual es que el agujero de ozono de 2019 podría tener el área más pequeña de cualquier agujero de ozono antártico desde mediados de los años ochenta”, reportó en una nota el CAMS.
El uso de productos químicos desde mediados del siglo XX, especialmente de algunos aerosoles y refrigerantes, había deteriorado la capa hasta que esta alcanzó su nivel más crítico a finales de los años ochenta. A raíz de esto, se firmó el protocolo de Montreal en 1987, en donde 196 países se comprometían a prohibir sustancias nocivas para el ozono.
La capa de ozono es una especie de escudo que sirve para bloquear la radiación ultravioleta y evitar que esta toque tierra. Se ubica de los 15 hasta los 35 kilómetros de altura aproximadamente, en la estratósfera.