En 2018, el INRIX Global Traffic Scorecard Report posicionó a Bogotá como la tercera más congestionada del mundo, por debajo de Moscú y Estambul. El más reciente informe, publicado en marzo de 2020, da cuenta de que la capital de Colombia fue la más congestionada en 2019.

A modo de conclusión, la firma asegura que la congestión vehicular continúa creciendo en todo el mundo. Esto debido, en parte, al aumento en la densificación poblacional. Sin embargo, la llegada de tecnologías que permiten la implementación de sistemas de micromovilidad en las ciudades (como lo es el caso de las patinetas y bicicletas eléctricas en Bogotá), sumado al incremento de personas que optan por caminar o andar en bicicleta, están ocasionando que el panorama cambie drásticamente.

En el top cinco, a Bogotá la acompañan Río de Janeiro, Ciudad de México, Estambul y Sao Paulo, respectivamente. Otras ciudades sudamericanas como Belo Horizonte (Brasil, 13), Quito (Ecuador, 18) y Guayaquil (Ecuador, 22) hacen parte del listado de las 25 más congestionadas.

El estudio que hace INRIX también permite ver la cantidad de tiempo que, en promedio, pierde una persona en un trancón. Es así como en Bogotá un ciudadano pasa 191 horas al año en su medio de transporte, o lo que es lo mismo, casi ocho días.

Ante tan mala calificación, hay que mencionar que Bogotá mejoró la cantidad de tiempo que, en promedio, pierde una persona. En 2018 el tiempo perdido fue de 272 horas (más de 11 días), por lo que en 2019 los bogotanos se ahorraron 81 horas perdidas en el tráfico. Esto debido, probablemente, al uso de soluciones alternativas de transporte.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que INRIX, para su medición en 2019 hizo un cambio de metodología. Anteriormente se miraba el tiempo promedio de una persona al salir de su barrio y llegar a su trabajo, pero esto arrojaba resultados imprecisos, puesto que en muchas ciudades no están discriminadas las zonas residenciales y laborales. En su lugar, tomaron en cuenta las vías más empleadas para calcular la cantidad de tiempo que una persona tarda de dirigirse de un punto a otro.

Otro aspecto a tener en cuenta es que el estudio no analiza las condiciones de transporte de ciudades complejas como las de China e India, entre otras.