La Policía Nacional, a través del Gaula y de manera articulada con la Fiscalía, desarrolló la ‘Operación Bicentenario’ con la que se logró la captura de 248 personas en diferentes regiones pero especialmente en Cali, Medellín y Bogotá.

Uno de los principales componentes del operativo y que contó con el apoyo del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), es el despliegue de diligencias de registro y allanamiento en 32 establecimientos carcelarios de Bogotá, Medellín y Cali y 21 departamentos del país.

El general de la Policía Oscar Atehortúa indicó que con las labores de inteligencia se estableció “que en las cárceles se tenían innumerables caletas en las cuales se encontraban escondidos elementos para ser utilizados desde estos centros de reclusión para cometer delitos entre ellos la extorsión”.

Se trata de depósitos creados bajo el concreto del suelo o dentro de estructuras como paredes donde algunos internos ocultaban celulares y elementos como baterías, cargadores, módems, tarjetas MicroSD e, incluso, estupefacientes. Las investigaciones indican que, a través de estos celulares, los internos presuntamente realizaban llamadas extorsivas a sus víctimas en distintas regiones del país.

El General explicó que este operativo en la cárceles de Colombia se pretende enfrentar el delito de la extorsión “que tanto daño causa a la sociedad colombiana”.

De acuerdo con las autoridades, en total se incautaron 988 celulares, 878 simcard, 42 microSD, 104 usb, 11 módem wifi, 285 cargadores de celular, así como 764 armas blancas y algunos estupefacientes.

El general Atehortúa señaló que ya se están adelantando las labores de investigación necesarias para determinar cuántas llamadas extorivas se hacías utilizando estos teléfonos celulares. Además señaló que uno de los casos se presentó en la cárcel ‘La Ternera’ en Bolívar, donde los reclusos construyeron una caleta bajo una cancha de microfútbol.