La excandidata presidencial Íngrid Betancourt, quien estuvo seis años secuestrada por las FARC, hizo una interesante reflexión frente a la carta de la guerrilla en la que piden perdón a las víctimas y las familias de los secuestrados a lo largo de su lucha armada.

Betancourt le dio valor a la carta de las FARC, y dijo: «por primera vez tengo enfrente de mí seres humanos, que no los tuve en la selva, en la selva tenía enemigos. Leo esta carta y de pronto digo aquí hay humanidad y eso lo quiero valorar y quiero decirle a Colombia: eso es importante».

 «»Lo que nos pasó en la selva nos cambió y de alguna manera nos mutiló y nos debilitó en muchas cosas vitales», analizó la excandidata presidencial liberada en la operación ‘Jaque’ hace 12 años.

Sin embargo, preguntada sobre sí perdonaría a las FARC por los años que pasó en la selva secuestrada dio a entender que está en una lucha constante para hacerlo dijo: «Yo tengo la decisión de perdonar, la disposición de perdonar está ahí, pero es obvio que todos los días está uno confrontado con las emociones que uno carga»

Sobre la carta también pidió no quitarle valor, porque «son los pequeños pasos que nos van a permitir alcanzar lo que queremos y la posibilidad de cambiar a Colombia poco a poco, pero sin matarnos».

Sostuvo que ellos – las FARC – «no saben qué es estar secuestrado, tampoco como sufren las familias, pero se están preguntando qué fue lo qué pasó,  qué fue lo qué sintió Andrés Felipe al morir, qué le decimos a la historia de Colombia con el papá que fue ejecutado por tener la valentía de jugarse la vida por ir a ver a su hijo?»

Y agregó: «las víctimas del secuestro fuimos tan utilizadas e instrumentalizadas»

Betancourt dijo que «la política para mi familia es como una maldición, mis hijos y mi madre de mis hermanas mis sobrinos mis familia todos los días me repiten la felicidad de que yo no estén política eso para mí es algo que me siembra en mi vida de hoy».